Con tintes de costumbrismo
me entierro en mis palabras,
ya ni me escucho ni me siento.
Las auras de prepotencia
carcome mis ideas sin parar
y mis sueños se fugaron a la esquina.
Nada vale sin sentir...
Sentimientos entrañables
de conjuntos y simplezas.
Es tiempo para salir de la atmósfera,
es momento de dejar de volar en silencio,
se acabó el recreo de mi mente.
El mundo ha respirado sin mí,
y que bien que lo ha hecho...
Mi solución es el problema.
INTOLERANCIA quemada en mi frente
no me llevas de nada
o solo me nadas de tanto que me dejas.
Ya basta!
Me siento incapaz, vacía, sin saber... una ignorante.
Es hora de dejar el capullo...
Es suficiente, ermitaña.
laranka