Lo mejor...

Un día voltearás a sonreír,
me mirarás a lo lejos
y sabrás mis deseos.

Un día entenderás mis ideas,
los sueños que quise contigo,
las nubes que hubiese pintado.

Un día comprenderás mis ojos,
ésta dulzura envuelta en dureza,
el sosiego con cara de hostilidad.

Un día sentirás estas palabras,
que se construyen par ano olvidar,
para no tener que gritar.

Un día pensarás en algún error,
en la oportunidad pasada,
en el pasado oportuno.

Un día cuando esté allá,
querrás viajar por los mares,
y cruzar algunas montañas.

Un día entre el cielo y la tierra,
lograrás percibir mi melodía,
pisada en el ayer.

Un día éste poema llegará a ti,
mi alma habrá caminado
y tu sonrisa se habrá terminado.

Un día en medio del campo,
los espíritus se habrán quebrado
y la muerte estará satisfecha.

Un día tan cerca como el sol,
tan peligroso como el frío
y tan penoso como la victoria ajena.

Un día como éste,
entre lágrimas y silencios,
te contaré que fuiste mi inspiración.

laranka
18/07/11

una corta historia

Indignada de tu respuesta,
dejé de lado mi belleza y
se desató un infierno.
Si tuviera que escoger,
escogería ahogarte y
dejar que tu alma me ame.
Luego de una pequeña lágrima,
una pequeña inexistente,
me levanté.
La silla todavía giraba en su eje,
me llamaba con tentación y
mi mente suplicaba para hablar.

Nuevamente aquí,
los alimentos adentro y
la furia creciendo.
¿Un nuevo intento?
Tal véz sería humillación o
el negado triunfo de mi ser.
La tarde está un poco frío,
pero son mis manos las que tiemblan y
mis oídos los que lloran.
Debo aprender a responder,
a escuchar las señales y
el presagio de mi muerte anunciada.

Todo es un artilugio del destino,
la vida le encanta matar y
bailar encima del cadáver.
Si me pide que vuelva,
la tonta regresaría felíz y
la felicidad se burlaría de la tonta.
No me pidas que deje de decir,
son las palabras las que no deciden y
mi espíritu el que se revuelca.
Has matado la sonrisa de mi rostro,
la ilusión de mi pecho y
las hormigas del mezón.

laranka
09/07/11

me rindo contra el mundo

En el momento menos oportuno,
mi confianza corre fuera de mi sentido.

Ella no entiende el por qué,
ella ha perdido la cordura frente al día.

La luz agobia sus pupilas,
derrite su color al blanco.

El mundo juega entre circos y serpentinas,
mientras que mi miedo se cubre de azul.

En medio del silencio,
las actitudes me clavan contra la pared.

El cuerpo de quién estuvo contento,
se derrama hasta el suelo intacto.

Ya no se trata de morir,
se trata de resucitar a tiempo.

Alzo los brazos y aprieto mis ojos,
tranquilos, hoy me rindo.

Las rodillas empiezan a danzar,
mientras que mis oídos pierden su intensidad.

Me rindo contra el mundo,
porque no soy consciente de las razones.

Se pierde la batalla hasta hoy,
solo respiraré por costumbre.

Guardaré mis palabras, hasta,
hasta que logren abrir mis labios.

Y si hablamos de mi pecho,
el está frágil pero felíz.

laranka
09/07/11

la COJUDA realidad

Has sentido como tu pecho puede quebrarse?
Has sentido como el centro se desploma?
Has sentido como las lágrimas bailan en tu corazón?

No soy más que cinco centavos,
más que una idea errada,
más que un músico frustrado.

Mi cabeza no aguanta su peso,
mis manos sangran vacías
y mis ojos cargan la culpa.

No eres el culpable,
es esa cojuda realidad
la que me engañó.

Envuelta entre telas de nubes,
encerrada en un espacio ficticio,
embobada en la falsedad de tu sonrisa.

No pienso navegar entre las piedras,
ni saltar la lluvia en la calle,
no quiero resolver esto.

Trizarme en medio del cielo,
olvidarme mis respiros,
volverme a equivocar.

Y dejar pasar mi llanto,
como un perro en la carretera,
como un mendigo en la acera.

He vuelto a tropezar,
con la mejor figura en el espejo,
con la torpeza más bella.

Hostíl, dura y transparente,
ignoremos como es llorar,
ignoremos que ya no puedo más.

Cerrar los puños y la tristeza,
sacrificar mi alma
y volverme un zombie.

Deja que los pasos, en el camino,
sean mis asesinos,
toma asiento y ven conmigo.

laranka
08/07/11

eres mi deseo

Como quisiera sembrar en tí,
un mágico paraíso,
en donde los duendes hablen francés.

Quisiera regar con agua dulce,
el centro de tu pecho,
justo donde tu herida no cierra.

Como desearía devolver a tu rostro,
la sonrisa que esa villana se llevó,
el brillo que una noche se disolvió.

Desearía que rompas esa venda,
que cubre tus dulces ojos,
que oculta tu alma al sol.

Como soñaría con entrelazarnos,
en un abrazo oscuro,
en un signo de piedad.

Soñaría con amanecer a tu pecho,
caminar en medio del campo,
escalar los estigmas de la sociedad.

Como quisiera cambiar la realidad,
pintar de un color inexistente,
regalarle un corazón sincero.

Quisiera tomar tu mano,
curar tu dolor
y besarte sin control.

laranka
03/07/11