Un millón de temerariosrondan mi mente,
atacan al cerebro
como si fuera la presa del día.
No quiero llegar al TAC del lunes,
tengo miedo de terminar...
Acabar con la cuenta,
quiero pasar sin sentirlo.
Nada de papeles brillantes
pompones o sorpresas,
ya es suficiente con una angustia...
a pesar de soñar con la alegría.
Se acerca... muy pronto
contadas las horas en mi contra.
He perdido la fe y ese hilo,
estoy sentada en medio de desconocidos.
La enfermedad me aflije,
quiere comerme como a un pastel,
trozo por trozo
hasta llegar al centro.
Suficiente! Es un amanecer más,
aunque desearía despertar contigo.
Eso no es un regalo,
es la ilusión de una niña en el tobogán.
Mejor me tranquilizo,
me acomodo en el respaldar de la tumba,
dejo al frío seguir
y al sol encorbarse en el horizonte.
Y mientras estoy sedianta,
cerraré mis ojos una vez más...
...para sentir lo que pasa en mi corazón...
y me extingo contando los TIC.
laranka
14/01/09
14/01/09
